Somos la única agencia dedicada al 100 % a proveedores de bodas. Creamos sistemas que atraen parejas listas para decirte “sí, quiero”, sin rogar por atención.
¡Descubre cómo duplicar tus bodas en 3 meses!
Vivir de las bodas debería ser mágico, no una lucha diaria por conseguir novios. Pero sin un sistema efectivo, llenar la agenda se siente como una misión imposible.
¿Te suena familiar? No eres el único. Muchos profesionales del sector nupcial sienten que atraerse clientes es más difícil que organizar una boda en una semana.
Fotógrafos, planners, floristas, videógrafos, fincas… si haces realidad bodas, nosotros hacemos que no te falten novios (ni dinero).
Aquí lo que hacemos es diseñarte un sistema real, personalizado y a medida para que los novios te busquen como si fueras el último vestido de Pronovias en rebajas.
Y encima, caminamos contigo para que no tengas que adivinar nada. Todo paso a paso. Sin excusas.
Olvídate de perder tiempo en redes o de rezar por recomendaciones.
Creamos para ti un embudo de marketing exclusivo para bodas: anuncios inteligentes, páginas que convierten, WhatsApps y emails que enamoran.
Tú solo haces bodas. Nosotros llenamos tu bandeja de entrada de clientes reales, sin que tengas que salir a perseguirlos.
Aquí no te soltamos leads y suerte.
Te acompañamos de verdad, uno a uno, ajustando cada detalle a tu negocio de bodas.
Desde tu primer anuncio hasta tu cierre de contrato, estamos a tu lado afinando estrategias que sí funcionan.
Esto no es un curso enlatado: es trato VIP de verdad.
Aquí no te vamos a vender cursillos online ni plantillas recicladas.
Te montamos un sistema real que hace una cosa y la hace bien: llenar tu calendario de bodas con parejas que no preguntan “¿me haces precio?”.
Llegamos a donde están los novios: campaña segmentada en Facebook y Instagram para que quienes buscan tus servicios te encuentren a ti primero.
Consigue clics a contacto sin que muevas un dedo: Construimos páginas y funnels que convierten esa visita en un cliente potencial, con mensajes persuasivos y seguimiento automatizado (emails, WhatsApp) que cultivan el interés del cliente mientras tú sigues con tu trabajo diario.
Monitorizamos, ajustamos y apretamos las tuercas cada mes para que tus resultados sigan creciendo.
No queremos que vendas una boda: queremos que tengas la agenda llena hasta que te plantees subir precios (y que puedas hacerlo).
Te acompañamos con asesorías 1:1 para enseñarte cómo cerrar tratos sin parecer vendedor desesperado.
Desde cómo contestar un mensaje hasta cómo rematar una videollamada: nosotros te llevamos de la mano hasta que firmes contratos como quien sirve copas en barra libre.
El sistema Madrigal no solo llena tu calendario. Llena tu cuenta corriente. Y, de paso, tu ego (porque sí, vas a tener que decir que no a clientes que lleguen tarde).
En resumen: mientras tú inmortalizas momentos inolvidables o planificas eventos de ensueño, nuestro sistema trabaja incansable en segundo plano para que nunca te falten parejas a las que decir: “¡bienvenidos!”
Cuando dejas de improvisar en marketing como si fuera una receta de cocina de tu abuela, pasa esto:
Nuestros clientes no necesitan invocar santos ni pedir deseos a las estrellas. Solo pusieron en marcha el sistema y ahora:
No sabía cómo justificar mis precios. Ahora ni los explico: quien lo entiende, paga. Quien no, que siga buscando en Facebook.
Pasé de tener 2 bodas al mes a tener que decir que no. Y lo mejor: sin descuentos absurdos.
Antes mi web parecía hecha por mi sobrino. Ahora los clientes me dicen que saben que soy cara… y aún así me escriben.
Mientras otros dan cursos de «cómo sobrevivir a un mercado saturado», nosotros hacemos que sobrevivas gracias al mercado saturado.
Somos un puñado de locos obsesionados con llenar agendas de bodas…y con tomarnos una cerveza cuando tú celebras que tu cuenta bancaria engordó.
Que sí, que ya va tocando tomárselo en serio
Si sigues creyendo que los clientes llegan por arte de magia, igual necesitas más que una consultoría.
Pero si sabes que ya toca mover ficha de verdad, déjanos llevar tu agenda de «vacío» a «por favor, no me pidan más fechas».
Haz que este sea el año donde no lloras por falta de bodas. Ni de billetes.
WhatsApp us